6. júl. 2006


Parte II de Scardanelli...

El mito de la figura Griega nos lleva a la Belleza como estética, tema central del poema, si recordamos, Diotima, mujer de la región de Matinea aparece en El Banquete de los diálogos de Platón, conversación con Sócrates quien la proclama como su maestra en las cosas del amor. Dos son las finalidades del argumento expuesto por Diotima: decirnos, en primer lugar, cual es la naturaleza del Amor y en una segunda fase mostrarnos en que acción podemos alcanzar las finalidades de este. En otras palabras: la utilidad del Amor. Pero el argumento no se resume a estos dos tópicos; de entre sus líneas podemos extraer al menos una primaria comprensión del pensamiento filosófico, adelantémoslo: el filosofo en cuanto ama, busca aquello que no posee a través de la acción constante en vistas del bien que lo acercará lenta e infinitamente a los más afable: la Verdad. Nuestra premisa se presenta de inmediato con los siguientes párrafos, entra la acción y comienza a lanzar símbolos e imágenes metamórficas en conjunto con el sujeto lírico, buscan la belleza a través del amor para llegar a la verdad. Susette enseña a Hölderlin las cosas del amor y la postra como su musa, entendiendo por esta, la imaginación humana que logró inventar para representar en forma concreta, los poderes creadores de la mente. Elevada a diosa de la poesía y el canto. Pero también Diotima es la contraposición de lo bello y lo siniestro, constante en las figuras del cuerpo poemático.
Por lo tanto, a través del sujeto lírico y los símbolos que lo circundan, podemos resaltar la Belleza como Verdad, ¿quién la fecunda? Diotima una vez más, ¿quién la produce? el poeta. En cuanto al estatismo simbólico y a la metamorfosis que solo trastocamos, tenemos que:
Imposible Dormir con luna llena, piensa la Griega, murmura la griega y el
Agua de la pecera entra en ebullición
[1]
La acción comienza, en la movilidad amalgamada de estados, sólido y líquido, para finalizar en una ebullición de la cual el primer símbolo salta a la superficie:

El pez asediado por el resplandor, se agita, pega contra
el cristal, cae retorciéndose sobre el mantel
[2]

El Pez próximo al agua, su medio vital, en muchos pueblos simboliza al mismo tiempo la fecundidad y la muerte. Signo de agua, femenino, negativo (pasivo) y móvil que acorralado por el resplandor trata de huir y pasar a otro lugar.

La griega lo toma entre sus manos, lo devuelve a las aguas
mercuriales. Pero salta otra vez buscando aire, en diástole
sus branquias se deforman, abre la boca, se hace daño, se
aquieta. Ya convertido en pulpo yace a los pies de la mujer
insomne
[3]

El clímax del poema se hace presente paralelamente al personaje lírico, representando en su totalidad por el Pez como quien manipulando se encuentra fuera del agua, ya que el resplandor ha absorbido la radiación solar, volviéndose así mercurial, otra contraposición que se fusiona, es decir, sabemos que el mercurio es el único metal que se adopta el estado líquido y al obtenerlo el agua toma brillantez, así que volvemos a la circularidad de un movimiento y un escapar, una búsqueda de estar bien, porque el amor a fin de cuentas es poseer el bien. Y entonces… la metamorfosis se logra, y nace otro símbolo: el pulpo, que si ponemos atención el pez busca aire y al convertirse en pulpo consigue tanto la respiración por las ventosas que tiene este molusco como la protección: y yace a los pies de la mujer insomne, oración que da pie al último párrafo:

Imposible dormir con luna llena, canta la Griega, y después
de sentarse en el sillón, cubre su rostro con una máscara
de cera
.
[4]
Cierra circularmente, es decir, como inició termina, la luna llena sigue siendo el detonante y para llegar a la oscuridad cubre su rostro con una máscara de cera. Encontramos otro símbolo femenino y de fecundación, la Luna que por lo general, femenina, protectora, pasiva, simboliza el inconsciente, la pasividad fértil. La resolución de los personajes y el encuentro de la belleza como verdad, filosofía entre lo siniestro y lo bello, entre las oposiciones y las gradaciones de la penumbra. La Máscara disfraza a la portadora y personifica aquello que la máscara representa, la cera, la blancura, sin rostro, sin nombre, la Belleza…la encarnación de los dioses y los demonios.

Concluyendo, Sueña Scardanelli, prosa poética que cuenta un hecho onírico en verso libre
dentro del plano de la ideas lleva al origen de las cosas sensibles, la belleza a través de la figura de la Griega y su contenido mitológico que desde una perspectiva helénica de la cultura griega se funde en la penumbra y aplica la fuerza creadora al poeta. Recordemos que Eros es elevado como principio universal y ejerce su poder sobre los hombres interviniendo en la constitución y curso del propio mundo. De ahí la importancia de que se tome la poética de Hölderlin para desarrollar la propia de Hernández que circunda en la sombra de la locura proporcionando un seguimiento para que Scardanelli continué hablando, soñando, cantando. Llega así a la totalidad de la contemplación poemática.
Existe un imaginario dinámico, multiforme dentro del arquetipo donde operan vivencias: la experiencia y el símbolo exponen la complejidad de lo imaginario, un topus uranus postrado en imágenes “existentes”. Una luz sublime e irracional como Diotima es por excelencia el juego de la muerte como presencia desnuda de lo trágico que muestra el inconsciente.
El amor es el mediador entre la sensibilidad y comprensión pura de las cosas existentes.
La Belleza como verdad es el canto de los poetas inmersos en el sueño para crear la poesía.
El último Hablar de Scardanelli es: existo y al mismo tiempo no tengo nombre, no tengo sentido, no quiero decir nada.
El performance se retira del espacio imaginario con sus diversas perspectivas para que Francisco Hernández continúe en la blancura de las páginas y los rostros que le ofrecen las palabras para reencontrarse como Poeta.
[1] Ibid. Pág. 14
[2] Ibid. Pág. 14

[3] Ibid. Pág. 14

[4] Ibid. Pág. 14
Aquí se termina el ensayito, y lean el libro.

Engin ummæli: